¿Cuál fue el resultado final del 11 de septiembre, en cuanto a derechos sustraídos? La realidad en cuanto a la supresión de libertades por la lucha contra el terror, se saldó con el infame PATRIOT Act..
Como en el año 2001, ha aparecido el motivo real detrás de toda esta parafernalia, el supuesto H.R.6666, o más conocido como el TRACE Act.
La «infame» Ley Patriótica
Según los conspiracionistas, «el 11 de septiembre funcionó a la perfección, y les ha servido de molde para futuras supresiones de derechos, haciendo uso de la triada del problema-reacción-solución».
El evento sucedió un 11 de septiembre, y un sólo mes después, el 26 de octubre, fue aprobada por abrumadora mayoría, tanto por la cámara de representantes como por el senado estadounidense, el PATRIOT Act, promulgado por George W. Bush.
¿Qué consiguieron con esta legislación?
Ampliar la capacidad de control del estado, mejorando la capacidad de las distintas agencias de seguridad estadounidenses, al coordinarlas y dotarlas de mayores poderes de vigilancia.
Además, esta ley promulgó nuevos delitos y encrudeció las penas.
No obstante, esta ley ha tenido tantos detractores, que parte de la sociedad estadounidense desconfía de su gobierno desde entonces.
Incluso, varios fallos judiciales han declarado al PATRIOT Act como inconstitucional, por violar derechos y garantías de la constitución de los estados unidos de américa.
H.R.6666 o TRACE Act
Actualmente, entre tanto ruido mediático y desinformación, a muchos se les escapa la realidad detrás de esta crisis sanitaria, que poco tiene que ver con nuestra salud, y mucho que ver con control, dependencia y vigilancia ciudadana.
Esto, ha quedado demostrado tan solo 2 meses después del inicio de la cuarentena en occidente, ya que, se dice (no está confirmado) que estaría lista para tramitar y aprobar, por parte del congreso de estados unidos, una nueva ley, el H.R.6666 o TRACE Act.
¿En qué consistiría esta nueva norma?
El mismo nombre del código lo dice, TRACE (Testing, Reaching, And Contacting Everyone Act).
Autorizaría al secretario de salud y servicios humanos otorgar subvenciones a entidades elegibles para llevar a cabo test diagnósticos y actividades relacionadas, como el rastreo de contactos, a través de unidades móviles de salud y, según sea necesario, en residencias individuales y para otros fines.
El código de Walpurgis
El 1 de mayo de 2020, el congresista demócrata Bobby L. Rush introdujo el H.R.6666. Este acta, esencialmente, estaría estableciendo un programa nacional de seguimiento de contactos y cuarentena, dirigido por grandes farmacéuticas.
Esta disposición, permitirá al CDC financiar entidades elegibles para que lleven a cabo test, seguimiento y rastreo de los contactos de un individuo infectado, y forzar el cumplimento de la cuarentena de todos sus contactos.
Las entidades elegibles son centros de salud, organizaciones sin ánimo de lucro, centros educativos, y cualquiera que el CDC considere apto para esos propósitos.
¿Cuánta financiación recibirá este precepto?
El monto de dinero extraído del presupuesto federal, que se genera de los impuestos ciudadanos, para rastrear y poner en cuarentena al pueblo, asciende a $100.000.000.000.
Sólo para este año 2020, y aumentará ese dinero en los siguientes años fiscales, mientras dure el período de emergencia.
Este TRACE ACT, con su cuádruple 6, no es más que otro paso en el camino del nuevo orden de las eras, a menos que, se destape toda esta información.
Ya sucedió en 2001, y esta supresión de derechos y libertades, no debe volver a suceder jamás.
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