La comunidad científica está revolucionada tras el hallazgo en China de un fósil en forma de tubo y de grandes dimensiones que ha sido datado en 500 millones de años.
Un equipo de científicos de universidades chicas y británicas, más concretamente de las Universidades de Leicester, Oxford y Yunnan, han hallado en Yunnan (China), en el interior de la región asiática, el fósil de una extraña criatura (prematuramente marina) que había pasado totalmente desapercibida por su color semejante al de la roca. Aunque dicen que esta criatura fue descrita hace cien años en textos antiguos, lo cierto es que no saben si es la misma criatura. Pero el fósil ha sido datado en 500 millones de años.
Esta extraña especie ha sido llamada “Allonnia Nuda”, y tenía un gran tamaño, más de 50 centímetros. Los investigadores y expertos que han datado y estudiado el fósil, dudan mucho para saber en qué punto del árbol de la vida situarlo, aunque finalmente han determinado que la nueva especie encontrada, pertenece a un grupo conocido como los Chancelloriidae. Un linaje de animales que poseían espinas, aunque es la primera vez que se encuentra a una especie de este tipo con forma de tubo.
Se cree que estas especies surgieron tras la explosión evolutiva que hubo en el Cámbrico, aunque su extinción no se hizo mucho de esperar. Todas las investigaciones y trabajos que han llevado a cabo este equipo, concluyen que presenta conexión con las esponjas marinas modernas y, este descubrimiento ha puesto en tela de juicio lo importante de estos fósiles en una evolución animal que se produjo de forma anticipada.
El color del fósil, que en un primer momento camufló por completo al espécimen, ha abierto una nueva esperanza de encontrar fósiles similares al encontrado, por lo que prestarán especial atención a la hora de hacer nuevas expediciones en la misma zona donde se encontró al enigmático ser fosilizado. Nadie sabe las criaturas que podrían estar ahí camufladas al ojo humano. Pero gracias al fantástico hallazgo, se llevarán a cabo nuevas expediciones en Yunnan.
Y, aunque los investigadores están convencidos de que este animal pertenece a una especie extinta de esponjas marinas, no todo el equipo parece estar conforme con esta explicación. Y muchos expertos, entre ellos biólogos marinos y arqueólogos, han discutido seriamente la conclusión de estos investigadores, y algunos apuntan de que podría tratarse de una especie alienígena que hubiera cohabitado con oras especies en el tiempo en que se data su existencia.
Estas nuevas hipótesis han abierto un debate en redes sociales y temas de la conspiración, que ya apuntan a que se está intentando silenciar lo que es evidente y que no consentirán que sepamos la verdad. Sea como sea, lo cierto es que siguen investigando al espécimen y que nuevas expediciones en la zona segura que traerán nuevas y fascinantes sorpresas. ¿Quién sabe qué hay todavía debajo de nuestros pies?
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Miguel Á. Fuentes
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